El desarrollo de los disfraces y trajes debe estar sujeto a ciertas normas no solo visuales sino objetivas.

 

Cuando se tiene un modelo previo es necesario adaptar a la realidad  el siguiente paso es ceder la idea al diseñador, con el fin de escalar realmente el producto final, el diseñador aprueba material, técnicas y medidas adecuadas.

 

Finalmente el equipo de patronaje, corte y maquinaria quien son imprescindibles pues sin ellos no se culminaría a bien en el proceso.